Como parte de la gira mundial que conmemora sus cuatro décadas de trayectoria, los británicos The Cult regresaron a Argentina para la primera de sus dos presentaciones en el estadio Obras Sanitarias, que volvió a ser el templo del rock porteño por un fin de semana.

Ian Astbury y Billy Duffy (voz y guitarra, respectivamente) mantienen vigente la banda, como sus dos miembros fundadores, a los que se suman en la actualidad John Tempesta (batería) y Charlie Jones (bajo). Así alineados, optaron por dar inicio al show con la parte más reciente, y a dejar clásicos hits para la segunda mitad y cierre de la noche.

Fue así que casi media hora luego del inicio del show, cayó la primera tríada de los himnos más esperados por la audiencia: «Edie», «Revolution» y «Sweet Soul Sister». Y de ahí en adelante continuar con un setlist de 17 temas que guardó lo mejor para el final: «Firewoman» y «Love Removal Machine».

El legendario escenario de Obras volvió a sentirse como en los ochentas: calor, humedad, escasa ventilación y un repertorio acorde a los años dorados del rock pesado como gran exponente de la cultura joven y rebelde. Pero ahora para un público adulto oportunamente menos agresivo y con una conducta acorde al rango etario de 40 a 60 años, que agotó las localidades para dos noches consecutivas.

Más nostalgia que pogo, y un emotivo reencuentro con la «secta» en la que la voz de Ian Astbury se mantiene en gran forma a sus 62 años; y con su carisma conectó en todo momento con sus fans y se mostró de excelente humor, aún en las condiciones exigentes en la caldera de Obras.

Esta noche repetirán el ritual, para completar un regreso que se hizo esperar por ocho años, se demoró más de lo esperado por la pandemia, y ahora tuvo su reencuentro definitivo.


Descubre más desde Photosniper

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.