El trío japonés Lamp , fundado en el año 2000 por Yusuke Nagai, Kaori Sakakibara y Taiyo Someya, se presentó anoche por primera vez a la Argentina con un show íntimo y emotivo en el C Art Media. Convertidos en banda de culto gracias a su mezcla de pop urbano, bossa nova, soul y soft rock, pusieron en escena una propuesta única y poco frecuente respecto a lo que el mercado musical suele asociar a las tendencias de oriente.
Lejos del colorido y frenetismo estridente del J-pop y sus agrupaciones ideales para la instantaneidad de redes sociales; Lamp propone ambientes soñadores y melancólicos. Reconocidos como una de las bandas que mantiene vigente el sonido del Shibuya-kei para las nuevas generaciones, ver al trío en vivo se siente como recorrer esa Tokio que no se se muestra en Tik-Tok ni instagram.
El sonido de Lamp funciona como banda sonora de la Tokio gris, melancólica y lluviosa que surge tarde a la noche cuando el frenesí turístico y los influencers desaparecen del paisaje urbano. Las luces de neón retro futurista, el silencio entre la muchedumbre que se pierde entre las mega estaciones de Shibuya o Shinjuku. La música de Lamp es la de ese Japón cotidiano donde el transporte público es un espacio de introversión, donde la amabilidad y el respeto son un mandato social.
La voz etérea de Kaori Sakakibara es una extensión de su flauta y marcan el tono distintivo del sonido del grupo, a los que se suma Taiyo Someya para compartir el liderazgo desde el centro del escenario y Yusuke Nagai en segundo plano aportando armonías desde con su guitarra.
El ambiente de la noche porteña se fue contagiando así del sonido sereno y variado en matices, que combina influencias del Brasil de los ’60 y ’70 con melodías pop occidentales y una estética delicada y nostálgica; para un público que se dejó llevar por un trance envolvente del trío.
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