La obra teatral “Ricardo III, Shakespeare otra vez” vuelve a presentarse en el Complejo Teatral Ítaca (Humahuaca 4029, CABA). El clásico de Shakespeare es reversionado y dirigido por Analía Mayta y protagonizado por Pablo Goldberg, quien definió a esta adaptación como “una tragedia que deviene en comedia”.
En diálogo con Photosniper, el actor que encarna a Ricardo III explicó que “la defino como una tragedia que deviene en comedia, porque la tragedia que sucede es tan grande que lo único que podemos hacer es reír, es lo único que nos queda y nos da libertad”.
El elenco se completa con Luciana Cervera Novo, Mauricio Chazarreta, Ema Mires, Ezequiel Olazar y Natalia Pascale. La pieza teatral se sitúa treinta años después de la guerra civil entre los Lancaster y los York, los cuales se quedan con el trono de Inglaterra. En este contexto aparece Ricardo, el hermano del rey que, inundado de codicia, hará lo que sea para quedarse con el poder absoluto.
Así lo comenta el Goldberg: “El personaje de Ricardo III es un ególatra, es un hombre que persigue el poder parasentirse vivo. Es un poder destructor, en el que por más que se destruya a sí mismo lo lleva adelante, porque lo único que le interesa es el poder. Es un ser deforme, no por lo físico, sino en lo moral y lo ético”.
La realización de esta adaptación presentó muchos desafíos tanto para los actores como para Analía Mayta, que debió aggiornar tanto el texto como los personajes a los tiempos actuales. Además, redujo la duración original de la obra que era de cinco horas a poco más de 60 minutos.
Por parte de los actores, la mayoría de ellos interpretan a varios personajes muy diferentes entre sí que constantemente entran y salen de escena. Uno de los elementos más llamativos de la puesta en escena es que todos los vestuarios cuelgan a la vista del público y los actores se cambian en el escenario.
Sobre esto, opina Pablo: “Ese develar la magia teatral permite que el público se sienta mucho más parte y opine; con su risa, con sonidos y con onomatopeyas”.
Otro elemento destacable es la abundancia del color rojo tanto en vestuarios como en escenografía. Este se empleó para poder reflejar la pasión con la que todos los personajes viven cada momento de la obra.
Como curiosidad, Pablo Goldberg no había sido convocado para la obra, y luego de dos bajas fue el tercer convocado para interpretar precisamente a Ricardo III.
Ya con el protagónico, reflexiona sobre lo que significa para él la actuación: “Lo importante es poder subirse al escenario y proyectarse hacia el otro. Me parece que lo esencial para el que hace teatro es esa posibilidad de poder hacer algo fuera de lo cotidiano, proyectarlo en el escenario y que se repita en otros, creo que ahí está la vivencia del teatro”.
Las funciones de “Ricardo III” serán todos los viernes de marzo a las 21 horas. Entrada general $7000, estudiantes y jubilados $6000.
Photosniper Agency 