En su regreso a la Argentina, ahora por primera vez con Mr. Bungle en forma de All Star del metal, el extraordinario Mike Patton se presentó el pasado jueves en El Teatro Flores y se puso el show al hombro con su virtuosismo vocal inigualable y una conexión con el público llena de emoción y cercanía.
A tres días de la final del Mundial, no hay recital en Argentina que no quede atrapado en el fanatismo colectivo y la expectativa por ver a Messi y la Selección en lo más alto del fútbol global. La camiseta albiceleste es el uniforme oficial de todo músico que se suba a un escenario hace un mes, desde el trap hasta el heavy metal, nacional o internacional.
Pero Patton, viejo amigo del público argentino y políglota dueño de un muy buen español, llevó la manija del público a lo más alto con su camiseta personalizada con apellido en la espalda, arengando a la hinchada con el hit viral del momento (“abuela, la la la la la”), gritando por Messi y la Scaloneta, formando una barrera para un tiro libre en vez del clásico saludo previo a los bises o firmando una pelota tirada al público como si fuera un lateral.
Patton literalmente se puso la 10 para hacer que un show de trash metal, avant garde y velocidades y volúmenes extremos sea una experiencia divertida. La improbable combinación de un repertorio de brutal death metal en medio de una atmósfera festiva y futbolera.
La actual gira comenzó a tomar forma en 2020, cuando regrabaron en estudio su demo original, “The Raging Wrath of the Easter Bunny” e incorporaron a los miembros originales (Patton, Trevor Dunn en bajo y Trey Spruance en guitarra) a dos monstruos del metal como son Dave Lombardo (batería, de Slayer) y Scott Ian (guitarra, Anthrax).
Pasada la pandemia y superados los problemas personales y de salud de Patton (que tuvo que suspender su gira con Faith No More por un cuadro de depresión y agarofobia producto del encierro durante la cuarentena), llegó la oportunidad para verlos en su mejor forma. Poco menos de hora y media de show que valió por los años de espera.
La lista se completó con covers de Van Halen, Slayer, The Exploited, Sepultura (para un cierre tremendo con “Territory”), y hasta Patton cantando “La cucharacha”. Porque si. Porque puede.
Sumar a Ian y Lombardo a la formación original ya es robo. El Mr. Bungle de hoy es un dream team de músicos que trascienden las fronteras del género metalero. Tocan todo excelente, fuerte, rápido y preciso. Relajados en una agresividad que sólo ser los de los mejores en lo suyo les puede dar. Con espacios para el jazz, las baladas, y todo lo que sea necesario para que el talento vocal de Patton pueda expandirse en todo su potencial.
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